domingo, 17 de julio de 2016

Aventura Pokémon #2!!!!

FIN DE SEMANA DE NUEVO!!! 

Sólo puede significar una cosa... Cacería pokémon. Me da un poco de risa esto, como les dije a mis queridos lectores la semana pasada, nunca tuve el placer de jugar o siquiera ver bien pokémon, por las ridiculeces que decía la iglesia de que eran criaturas que incitaban a adorar al diablo, sin embargo, siempre los he considerado geniales y a pesar de no entender muy bien todo, siempre me han gustado.

Toda la semana estuvimos saliendo un poco a algunas plazas y lugares de la zona, descubrimos que en una plaza en particular ya de noche, salen bastantes moustrillos buenos y geniales, a cada como 2 metros había uno diferente. 

En la escuela también hay bastantes, casi siempre hay Meowths e inalcanzables Persians. Lo bueno de la escuela es que tiene como unas 5 o 6 pokeparadas, si no es que algunas más.

En fin, ayer sábado fuimos al mismo parque de la semana pasada, esta vez se nos unieron mi otro cuñado y su novia, ambos del equipo azul, como Peter y yo. Mi cuñado apenas lo descargó ayer y es bastante gracioso verlo emocionarse por animales tan comunes como un Zubat que a cada 3 pasos te encuentras.

En ese parque hay una zona donde alcanzas unas 4 pokeparadas, pusimos lure en como 3 y nos llenamos de moustrillos. Yo subí de nivel. Utilicé mi luckyegg, mi incienso era una locura. De repente el área, de estar algo desolada, se llenó de jugadores atraídos por el cebo. 

El viernes, fui a un rancho de la escuela, que tiene un pseudoquirófano de quinta XD donde según aprendimos cirugía el semestre que acaba de concluir, cuando la verdad es que apenas en el curso, que lleva como dos semanas hemos aprendido mucho mas, a esa escuela debería darle vergüenza la incompetencia que algunos de sus maestros tienen, yo creo que después les hablaré abiertamente sobre los problemas tan grandes que tiene la Universidad DeLaSalle Bajío.

En fin, extrañamente, en el rancho hay un gimnasio y tuve la mejor idea de todas, vencerlo y dejar a mi pokémon más poderoso en el momento, para que durante todo el fin de semana pueda hacer cashout de moneditas. Funcionó por completo, a ver cuanto me dura, quizá hasta toda la semana, después les informaré.

Quiero hablarles también de la lluvia de ayer sábado, fue hermoso. Estábamos en una biblioteca/parque, con árboles inmensos de troncos gruesos. Me encanta ese lugar. 

Justo cuando llegamos, cayó el agua con fiereza, gotas enormes y abundantes. Comencé a reír como loca, levanté mis brazos y giré. Me encanta la lluvia, mojarme en ella, pocas veces he tenido el placer, cuando era niña perdí la audición casi total de mi oído derecho, tenía muchas restricciones por la seguridad del otro oído, una de ellas era mojarme en la lluvia por el riesgo a enfermar, irónico no? a veces lo que más te gusta es lo que menos puedes o debes hacer.

Pero ayer llovió y corrí y me sentí viva, era infinita, quería quedarme horas ahí sintiendo como se mojaba mi cabello, sentir mi ropa mojada pegada a mi cuerpo, correr bajo la lluvia, besarlo, seguir riendo como si estuviera completamente loca. Pero no me duró mucho el gusto, tuve que ir al auto a refugiarme porque Peter estaba preocupado. Esos pocos minutos, significaron tanto en mi vida, es un recuerdo que guardaré por siempre conmigo.

Volvamos a los Pocket Monsters. Hoy domingo fuimos a otro parque al otro lado de la ciudad, esta vez, se nos unió un amigo de la prepa, que Peter y yo tenemos en común, estar ahí al principio, bueno estuvo padre, hasta que la tonta aplicación falló infinitamente y me perdí de un Ivysaur T.T . Al menos pude farmear pokebolas.

Hay muchas más cosas que contar, como la comida en las alitas y la pésima atención que tuvimos en el Rooster Wings. Pero quizá sea para otro día.

Por ahora, nos leemos hasta la siguiente entrada...

Cortana!

domingo, 10 de julio de 2016

Pokemon Go Experience!

Bueno, la verdad es que pokemon siempre me ha gustado, pero por desgracia cuando era niña me separaron de ese mundo por esa tontería de la iglesia de que pokemon era del diablo. En fin, me siguió gustando y a pesar de ser una niña no me creí la tontería esa, pero en ese entonces no comprendía lo que era la libertad y creía que mis padres dominaban en mis acciones y decisiones.

En fin, descargué la apk de estados unidos a mi celular de Pokemon Go! nunca he jugado los videojuegos y la verdad, como tenía esa prohibición de mis padres, pues no me llamaba tanto la atención, aunque muy a su pesar, siempre amé y amaré el anime.

Así que descargué la app, al principio pues toda noob verdad? no conozco de pokemones y como buena niña que soy me enternecen tanto las cochinadillas esas, es que son tan lindos!!!

El día de ayer fuimos a darle una vuelta a la colonia de Peter nos invitó su hermano a cazar pokemones. Para que conste, al principio fui más acompañándolos a ellos y pues una de las cosas que mas me gusta hacer en la vida es caminar, así que esa era mi razón principal, hasta que comencé a cazar tantos animalillos.

Es bastante divertido, además de que el juego cumplió perfectamente con su cometido, salimos a caminar bastante tratando de encontrar la mayor cantidad de pokemones sin darnos cuenta de todo lo que habíamos recorrido.

El día de hoy fue similar, primero fuimos a un parque muy conocido y popular de mi ciudad a cazar "pokeparadas" y pokemones, me salieron algunos bastante lindos, regresamos a casa a comer y volvimos a salir de cacería. Esta vez nos dirigimos al centro de la ciudad. Lo más divertido fue el haber encontrado una razón para juntarnos a hacer una de las cosas más tontas y simples, pero sanas y divertidas.

Peter y yo intentamos conquistar un gimnasio que estaba localizado en una iglesia, pero supongo que había demasiada interferencia divina porque no dejó de trabarse, hasta que nos cansamos de medio quemarnos vivos bajo el sol.

En fin, pasé un día bastante bueno a lado de gente muy linda y agradable, fue bastante productivo y divertido, si alguien llegara a preguntarme si recomiendo la descarga de este juego, diría que completamente, que salgan a la aventura de hacer algo diferente y divertido y que de preferencia lo hagan en compañía de alguien porque de verdad que aumenta muchísimo el disfrute de la experiencia...

Espero seguir platicando sobre mis próximas pokeaventuras...

Cortana!

sábado, 2 de julio de 2016

Entrada de diario #2 Yo antes de ti, película

Peter me llevó al cine, fue lindo, me molesta un poco estar encerrada, así que me llevó a ver "yo antes de ti". He de decir que la película fue de mi elección, pero ambos terminamos disfrutándola. Me pareció bastante raro ver que Daenerys Targaryen trabajara para Tywin Lannister y anduviera con Neville Longbottom, fue algo hilarante.

La película me recordó algo que aprendí al iniciar una relación con Peter, el amor siempre es unilateral. Muchos dirán: estás loca! claro que no, es cosa de dos. Pero he de decirles queridos lectores que todo el que no entienda este concepto, entonces no comprende lo que es el verdadero amor. 

Me explicaré mejor, cuando alguien ama de verdad, ama a pesar de, ama sin barreras y ama sin importar qué. Me refiero sencillamente a que alguien que ama no espera nada de la otra persona, ni siquiera amor de vuelta, sólo espera que sea feliz y que disfrute de su vida y si llega a amarla de vuelta pues que mejor.

Imaginen pues una pareja que tiene algunos años de estar juntos, posteriormente terminan por que el chavo ama a alguien más, entonces la chica le reclama que ella lo ama y le dio todo a él, que no es justo que la abandone y que la deje por alguien más. El chico tiene todo el derecho de no amarla de vuelta y no está bien que se quede sólo por los sentimientos de ella y por lo tanto intente abandonar lo que verdaderamente siente. Así como que cuando amas y entregas tu ser, se supone y así debería de ser, das todo sin esperar nada a cambio, ella no está mal en haberle entregado su corazón.

Entonces, se entiende mi concepto no? Claro que se tiene que entender que cuando dos personas deciden entrar en una relación, llegan a ciertos acuerdos, que no necesariamente deben ser mencionados con palabras, como la exclusividad o la fidelidad, entre otras cosas, es como una especie de contrato que se da por entendido, que quizá esté un poco separado de los sentimientos.

He aprendido con el tiempo que amar debe ser cosa mía. Como sabrán los que han leído mis entradas anteriores, Peter no ha sido el único de mi vida y por mucho tiempo me enojé por lo tonta que fui al entregarle mi corazón a Irie, tiempo después, cuando pude perdonarme, me di cuenta de que yo, no cometí ningún error, él no tenía porque amarme, el amor no es una obligación, es unilateral, yo amo y punto.

Es algo difícil de comprender, tanto como la verdadera y total libertad....

Cortana!

miércoles, 29 de junio de 2016

Entrada de diario #1

Hace unos seis meses que decidí que tenía que distanciarme de mis padres por un tiempo, la verdad es que nadie pudo comprender mis decisiones como lo hizo Peter, quien por cierto ha sido el mayor apoyo que he tenido en mi vida.

He de decir que yo he sabido desde siempre que la vida no es fácil y hay muchas cosas que la hacen quizá, hasta imposible, pero siempre encontramos como salir adelante no? Al final de cuentas, la vida sigue y sigue y sólo la muerte es capaz de detenerla, por muy tonto que eso suene.

Pero claro que no es lo mismo saber algo empíricamente que científicamente, con prueba y error o en su defecto acierto. Este semestre bueno, ha sido uno de los más difíciles y estresantes de mi vida y eso que he tenido una vida llena de complejas situaciones, maestros que no hacen su trabajo o prefieren entablar guerra con sus alumnos, compañeros de clase locos que sólo buscan como sabotearte o como hacerte sentir menos, entre un sin fin de cosas.

No sé ni por dónde empezar, siempre se dice que no hay como el hogar o que no hay como sentirse en casa, bueno, en mi caso, nunca he tenido esa sensación, nunca he sentido que tengo un hogar o un lugar al que pueda sentarme y decir: "Por fin en casa!!!". Claro que he tenido techo y a final un lugar donde dormir y comer, pero no sólo se trata de eso o sí? tenía entendido de que se trata de un lugar al que deseas llegar, estar y te sientes cómodo estando no? pues en mi caso siempre ha sido un lugar del que quiero huir y entre menos tiempo esté mejor para mi, las calles de la ciudad siempre han sido mi mejor refugio, las plazas, los amigos, Peter.

Es cuando me he salido que me doy cuenta de eso, de que nunca he tenido un hogar, he de aclarar que al menos por ahora nunca me ha faltado nada material, tengo ropa, comida, escuela, etc. Pero la vida va más allá de eso no?

En fin, lo que daría por ser millonaria y simplemente poder huir de aquí para hacer realmente mi vida, no puedo, no ahora.

Luego te das cuenta de que lo que te han dicho toda tu vida es cierto, no mereces nada o lo que mereces son desgracias o desdichas. Es increíble lo que un montón de eventos unidos pueden hacerle a una persona no? Siento que cada vez pierdo más la batalla que ganarla y quisiera que la guerra de la vida, simplemente terminara.

Como dije, nunca he tenido un hogar o un lugar al que desee llegar después de un largo día, sólo he tenido ese lugar al que tengo que llegar a dormir porque ni modo que me quede en la calle o yo que sé, porque tengo que respirar.

Desgraciadamente soy demasiado cobarde como para dejar de molestar a todos y simplemente desaparecer para siempre del mapa, soy demasiado cobarde como para simplemente irme a mi suerte y mandar todo al demonio o quizá dependo demasiado de las migajas que recibo de los demás. 

La verdad a veces es muy dura, como el hecho de aceptar que hasta ahora sólo he tenido un lugar donde dormir. Sin embargo es liberador comprenderlo, siempre supe que al vivir con Peter y su familia no tendría tampoco un hogar, lo cual, bueno, así fue como sucedió, en fin.

Este tiempo lejos me ha servido para darme cuenta de quien soy yo, quien es Cortana, la verdad es que soy una mujer libre, demasiado libre, soy una persona que a diferencia de muchas personas comprende realmente lo que es la libertad y no le tiene miedo a ello, es más se siente más gusto en ella. Soy también una persona con grandes expectativas evolutivas por parte de la humanidad y es por eso que me decepciona que haya tanta gente que le guste vivir en la ignorancia, sin educación ni clase, escuchando música que sólo denigra al intelecto y los buenos modales, creo que la humanidad puede ir más allá de eso.

Soy una mujer que defiende abiertamente los derechos homosexuales porque, bueno es obvio, mis mejores amigos lo saben pero Cortana, damas y caballeros, es bisexual. Es difícil darse cuenta de lo que uno realmente es pero más aún aceptarlo y aceptar las consecuencias que pueda cargar, así como el posible desprecio de tu familia. Esto por supuesto es algo que ya sabe Peter y por supuesto que con esto no estoy diciendo que iré a buscar una pareja diferente, es sólo que se siente bien ser uno mismo y ya, aceptar que el amor viene en diferentes y raras combinaciones y envolturas y que nunca debes juzgar.

He crecido bastante en este periodo, antes era una princesa inútil que poco sabía hacer, ahora soy más princesa que nunca, a lado de un gran caballero, que aprendió a ahorrar, administrar su dinero, invertir, e incluso sabe ser independiente haciéndose cargo de sus propios asuntos, así como la cocina y su ropa.

Pero es mucho para discutir el día de hoy, estoy emocionada, esta entrada era para depurar mi alma de un semestre largo lleno de altibajos y de estreses, hasta que bueno, me he dado cuenta de lo mucho que he crecido y lo mucho que amo ser yo, mi personalidad completa y mi libertad, aún me falta mucho por recorrer, como el hecho de que quiero arreglar las cosas con mi familia, pero yo, cada vez soy más poderosa.

xoxo.. Cortana!!

jueves, 14 de enero de 2016

Te escondes en una estrella...

Las nubes estaban demasiado bajas, esa fue una especie de señal para mi de que estabas cerca. La densidad en el agua que contenían estaba demasiado fría, al menos más de lo que el aire en general, por lo tanto las nubes estaban más bajas de lo normal, podría jurar que si levantaba mucho las manos podía tocarlas, era cuestión de imaginarlo y sentirlo. 

Un elemento físico normal que pasa en cualquier momento es una señal de que estás conmigo, porque me hace volver a mi niñez y sólo puedo sentirme tan infantil como cuando estoy contigo, entonces ¿Cómo es que no es una señal de tu presencia, que las nubes estén tan bajas?

Luego árboles frutales y también estás ahí, escondido entre sus ramas, acechando, como un gato salvaje. Me recuerdan a ti, dulces, fuertes, bondadosos, enormes, llenos de vida, son representaciones naturales de ti, por lo tanto los árboles también son señales de que aquí estás conmigo. 

Atardece, está el rojo de tus labios, la delicadeza de tus besos en las sombras dibujadas de las palmeras ante el continuo desenlace del día y la búsqueda del Sol por desaparecer y dar paso a las sombras y a su amada la Luna, quien ahora con su luz ilumina nuestros pasos al andar.

Me siento serena, tranquila, feliz, estás en cada cielo, en cada verde, en cada aroma, en cada flor, escondido en las estrellas que me cuidan pacientes y amorosas. Me enamoras aún en la ausencia, lleno de detalles luminosos y nebulosas de azúcar. 

Desde que estoy contigo soy supernova, soy brillo, soy celeste, soy rosita amanecer. Entonces mi sonrisa ilumina caminos oscuros, una prueba más de la magia de tu amor. Aquí estás, dentro de mi, de eso no tengo duda alguna, te siento y te manifiestas en cada hoja de otoño que ha de caer de los árboles, eres rayitos de sol a través de las hojas verdes de los árboles que no son perinifolios, eres esquinas mágicas, eres mi pedacito de cielo, eres vida y soy vida contigo...

Cortana!

martes, 5 de enero de 2016

Ya es casi nada...

Es difícil, lo sé, lo sé porque lo he vivido, pero también es hermoso, han sido los 5 meses más difíciles de mi vida, pero creo que es aquí cuando uno se da cuenta de que es para siempre, cuando puedes superar cosas así, es cuando todo cobra sentido y es más fácil y es para siempre.

Ha sido muy difícil estar sin ti, pero extrañamente ha sido bastante fácil, yo siempre con mis contradicciones, no puedo evitarlo, aparentemente todo tiene sentido.

Ha sido un sueño constante, a veces despierto y podría jurar que sólo me quedan horas para volver a verte y de cierto modo así es, sólo son horas, días, que pasan lentamente pero cuando volteas resulta que el tiempo ha pasado tan rápido que es increíble que sea cierto, lo que uno podría considerar como una eternidad, ha sido más la ilusión de un pestañeo.

Me hace sonreír, me llena de alegría, pensar que pronto te tendré de nuevo, no sólo tras una pantalla, en cuerpo y alma, podré mirarte a los ojos directamente y decirte sin miramientos todo aquello que he callado por 5 meses.

Me hace feliz todo lo que hemos pasado juntos, todas esas aventuras que hemos de contarle a nuestras pequeñas y después a nuestros nietos.


Ya hemos dejado una huella muy grande en este mundo, y lo que nos falta 
por hacer...

Cortana!

En viajes separados parte 6 Periquitos por doquier

Desperté algo temprano, quizá eran como las 9 de la mañana del día 21 de diciembre del 2015. No hacía tanto frío como lo había hecho en otros días, se podría decir en realidad que el clima estaba delicioso, algo fresco, pero lo suficientemente cálido como para utilizar un par de shorts y una blusa simple, sin chamarra, pero seguía siendo fresco, es ese tipo de clima agradable que a mí en lo particular me encantaba, era perfecto.

Subimos al auto, estaba nublado, el mismo camino hacia el pueblo, nos detuvimos unos segundos en el ciber – café, pero estaba cerrado, así que fuimos a desayunar.

El lugar era, cómo podría decirse, inusual. Nos detuvimos en una ferretería, que contaba con un puesto de comida en frente de la misma. Ordené un par de quesadillas con chicharrón. Está quizá de más mencionar lo exquisitas que estaban las condenadas, con un poco de frijoles negros y algo de sal, acompañados por supuesto de una coca – cola de vidrio super fría. Es sin duda un muy buen desayuno.

Fuimos de nuevo a dar una vuelta al ciber – café. Esta vez ya estaba abierto, así que aprovechamos lo poco que pudo durar, el internet para revisar pendientes. Logré hacer un pequeño contacto con Emanuel, hasta que de súbito el internet desapareció y no pude decirle ni adiós, ya será mañana que le explique cuando esté en una ciudad decente con internet y señal decente.

Fue como una señal del destino y volvimos al hotel, el resto del día no fue muy productivo, sin embargo lo disfruté bastante. Me tome uno de los baños más deliciosos de mi vida.

El día seguía regalando ese vigor, esa pureza que invitaba a sentirse calmado, en armonía, los pájaros cantaban sin parar, el viento soplaba suavemente, se escuchaba un murmullo del agua que corría por el río, el clima era delicioso y había paz. Sólo faltaba él y hubiera estado completa mi felicidad. A pesar de llevarlo siempre conmigo, no estaba, está lejos, a medio mundo de distancia y ni siquiera podía mandarle un mensaje para decirle, “te siento conmigo”.

Abrí mi libro y continué con mi lectura, Asimov me tenía cada vez más embelesada con sus múltiples historias, llenas de personajes tan intelectuales que me gustaría conocerlos en persona. Hace que uno piense en los robots, como seres con sentimientos, capaces de poner su existencia en riesgo con tal de proteger la humana, me hace sentir aún más cariño por los humanoides de lo que ya tenía.

Posterior a mi lectura, di un pequeño paseo por los jardines del lugar, dejando que la brisa tocara mi rostro, escuchando a las avecillas que vivían una vida muy simple, pero llena de alegrías y vuelos por el inmenso cielo. Escuchaba el río incansable y veía pececillos en lo que papá llama “la guardería de pececillos”, los escuchaba por todos lados, iban de un árbol para otro, chismorreaban, se pasaban noticias, se acicalaban, se miraban unos con otros, algunos notaban mí presencia y seguramente la comentaron con los demás. Los periquitos verdes eran muy curiosos de observar, son animales monógamos; que tienen una sola pareja para toda su vida, viajan con ella a todos lados y se acompañan siempre, es sumamente romántico y hermoso, algunos quizá me dirán que es algo muy cursi, pero de igual manera a mí me gusta lo cursi, así que no me molesta. Cantaban haciendo un escándalo a donde quiera que fueran. Eran de un verde indescriptible, preciosos, aves libres, libres para volar a donde quisieran, sin embargo su mundo se reducía a esos árboles para que yo pudiera contemplarlos el día de hoy.

Fuimos a comer, ya era algo tarde, algo así como las 5:30 de la tarde, comenzaba a cambiar la coloración del día, se notaba ese cambio de luz que se da a las 5:30 de la tarde en horario de verano, sumamente peculiar y a mi parecer, una de las horas más hermosas del día, justamente 5:30. Subimos por las escaleras con dirección al cielo, pasamos la cascada, y llegamos por fin al restaurante.

Fetuccini con crema de chipotle, una coca de lata y mucho parmesano. Empezamos con un guacamole, con lo que se puede esperar con un guacamole, algo simplemente delicioso. La música de repente estaba bien, recordando algunos de los buenos clásicos del pop y luego se ponía demasiado contemporánea y lo arruinaba un poco.

Después de unas crepas con cajeta y algo de nieve, un vaso de leche con chocolate y algo de azúcar. Caminamos por la oscura carretera hacia la entrada del hotel, las escaleras con dirección al cielo, no eran lo más adecuado para utilizar cuando la luz era completamente nula, cualquier paso en falso y significaría la muerte de alguien. La carretera tampoco era una opción satisfactoria, pero era la mejor en este caso. Fueron aproximadamente unos 15 minutos hasta la terraza. Dejamos las cosas que nos sobraban dentro, como bolsas, chamarras y disfrutamos de la apacible noche con música de fondo y luces románticas.

The end…

Cortana!

lunes, 28 de diciembre de 2015

En viajes separados... Parte 5, Un juego de niños... Soy la Capitana :)

No había empezado bien, papá se había molestado como siempre por nimiedades y canceló definitivamente los planes del día. Pensé que todo iría de mal en peor, que como era la costumbre, papá se molestaría con todos y nos mandaría por un tubo, nos apartaría y nos dejaría aún más solas en medio de la nada de lo que ya estábamos, al principio parecía que eso sería.

Así pues las chicas decidimos subir por las escaleras que van hacia el cielo al restaurante y tomar un poco de alimentos mañaneros para ahuyentar un poco el hambre de nuestros estómagos. Entonces subimos, aparentemente el desayuno estaba más rico de lo normal, había unos chilaquiles rojos que no enchilaban, pero estaban bastante buenos, con frijoles.

Después de desayunar bajamos a nuestra terracita y bueno, papá no estaba como era de esperarse, yo estaba comenzando a desesperarme, quería volver, la verdad es que no me gustaba estar en medio de la nada y menos en esas circunstancias.

Mamá insistió en que no me fuera al pueblo, así que de mala gana me quedé ahí en la terraza leyendo Asimov; terminé un cuento por cierto. Después de un rato de silencios incómodos, se escuchó la voz de papá, estaba en uno de los botecillos que renta la gente para remar por el río del lugar. Fuimos, traté de que mi mal genio no se notara, aparentemente las cosas habían mejorado, por lo tanto no quería empeorarlo ni dar motivo de ser de nuevo la causa de los problemas y las desgracias.

Invitó a mamá a pasear con él y se fueron por largo rato “al otro lado”. Era un lugar increíble, lleno de naturaleza y lejos de humanos que lo perturbaran, excepto tal vez nosotros por esta ocasión. Después de estar en “el otro lado” remaron rumbo a la cascada y a quien sabe cuántos lugares mágicos e insospechados. Yo decidí que una siesta sería de lo más oportuno en lo que volvían a la terraza y proponían algo que hacer.

Así sucedió, después de un rato, regresaron y papá sugirió que todas debíamos dar un paseo en el bote. Mamá no quiso participar esta vez. Tomé un remo y entré a mi barco, era la capitana gatuna de esa embarcación, mi tripulación dependía de mis comandos y mis remos. Entre papá y yo remamos, tomando rumbo hacia las cascadas, hasta que llegamos a un punto en el que el agua fluía tan fuerte que no nos dejaría avanzar más y nos quedamos en el mismo punto con vanos esfuerzos de continuar, hasta que nos dimos por vencidos y regresamos a explorar nuevos mundos.

Después del fracaso de aventura hacia la cascada, regresamos a tierra, recogimos un par de víveres, tripulación más fresca; mamá se nos unió, y remamos haca “el otro lado”, a explorar las tierras insospechadas, mi tripulación se amotinó, capturaron el barco y después de dejarnos a papá y a mí en esa pequeña islita, abandonaron a su capitana por un rato.

Papá y yo nos topamos con un río estancado y tierras jurásicas, llenas de helechos, de naturaleza y de lugares mágicos, llenos de oportunos lugares para fotos místicas y de espacios para tomar un baño delicioso después de días de navegar. Buscamos animales o alguna señal de vida, además de las plantas y el agua. Lo único que encontramos fue el sonido lejano de los pájaros que seguramente comentaban entre ellos, la leyenda de la capitana que ahora exploraba sus tierras. Miré sonriente hacia arriba, sabía lo que murmuraban esas aves, sus múltiples batallas con la espada, que no era por nada, pero era bastante hábil con ella.

Así pues continuamos caminando, encontramos una vereda y la exploramos, nada sospechoso, algunas lianas por aquí y por allá. Ninguna criatura existente por esas cumbres. Bajamos de nuevo y recorrimos el río, dimos con aguas estancadas, sin movimiento, algo muertas, las liberamos, el agua comenzó a correr, las hadas revolotearon, había magia, era como si hubiéramos destapado una prisión de haditas del bosque, todo comenzaba a brotar y a cobrar más vida aún y el agua, comenzaba a oxigenarse, lista para lo que viniera.

Pequeños subestanquitos se llenaban con ímpetu. Después de arduos trabajos en ese paraíso, dimos con el lugar, las pequeñas haditas del bosque, en agradecimiento por haberlas liberado de su prisión, nos guiaron hasta allí, un paraíso de cascaditas, indescriptible, con aguas cristalinas, un agua deliciosa para tomar un baño y refrescarse de los trabajos de capitana. Papá no lo pensó dos veces y se tiró un clavado…
-Aah! Está helada, ven entra un rato aunque sea.

        La verdad era que no podía ingresar al agua si estaba muy fría, mis oídos sufrirían el percance y posteriormente me daría migraña, pero no me perdía de la vista por nada del mundo, me quedé tentada de saltar y sumergirme en el agua.

        Después los marinos regresaron por su capitana, y dos de ellos se bajaron. Mis hermanas tenían que ver la maravilla que las haditas nos habían mostrado y por supuesto tenían que observar la laboriosa obra de su capitana en el río. Llegamos y encontramos ciertos desperfectos, que fueron arreglados por todas y el agua siguió entonces su curso. No se maravillaron como lo hubiera esperado, pero no importa, la experiencia a mí nadie me la quita.

        Remamos de nuevo a tierra firme y nos asentamos en nuestra isla. Tomé una bebida de las que preparan aquí, estaba bastante buena y un poco de botana también.

        Mis hermanas tomaron un baño y después nos encaminamos al pueblo a tomar un poco de alimentos, de nuevo al lugar al que habíamos ido ayer, unas exquisitas enchiladas verdes con frijoles, ensalada de lechuga y tortillas, obvio no falta la cebolla.

        Volvimos al ciber – café de ayer, esta vez pedí un Mocha caliente, fue una excelente decisión. Tuve una encantadora oportunidad de conversar de nuevo con Emanuel, me dio mucha emoción. Me la estoy pasando muy padre, ha sido un viaje con algunas sorpresas, aunque me hace falta mi compañero principal de aventuras y mejor amigo, cuando dejamos de conversar se me botaron unas pequeñas lagrimitas; de nuevo. Parece ser que le está yendo bien, hará un “Secret Santa”, con lo que yo los amo, lo envidio poquito. No faltó la cursilería claro está. Después de charlar por quizá una hora, nos despedimos y me tuve que marchar.

        El día fue inesperadamente extraño. Divertido, lleno de imaginación y viajes, me hace feliz pensar e imaginar que algún día Emanuel y yo vendremos a este mismo paraíso y entonces jugaremos juntos, imaginaremos juntos y conquistaremos juntos y quizá después también con nuestras pequeñas gatitas.

To be continued…


Cortana!

En viajes separados... Parte 4 El paraíso de los gatos

Amanecí un poco más descansada y pese a lo que uno normalmente esperaría de mi desperté a eso de las 9 o diez, la verdad es que no sabría decir, no revisé el reloj hasta que dieron las 11 y ya llevaba quien sabe cuánto rato despierta.

Mamá y papá bajaron al pueblo a comer menudo, a mi particularmente no me gusta. De ahí mismo donde desayunaron nos trajeron unas quesadillas, me costó bastante trabajo comer la segunda, puesto que tengo los brackets y es bastante incómodo.

Aun así, un par de quesadillas no eran suficiente alimento y tenía la sensación de querer comer más. Mis hermanas concordaban conmigo, así que decidimos que iríamos al restaurante del hotel a ver si había algo interesante en el menú para comer. A mí se me habían antojado unas crepas, pero al parecer sólo están en el menú de la comida. Así que comí un poco de pan, jugo de naranja y “chocomilk”.

Fue un día bastante extraño, al principio pintaba a ser aburrido y sin chiste, un montón de personas tiradas en el pasto sin nada que hacer, una leyendo, otra jugando con el agua, otra dormida en el pasto, en fin. Me quedé un rato leyendo Asimov, también me quedé mirando hacia el paraíso de en frente imaginando incontables historias, en las que figuraban un Jaguar y muchas aves.

Fue entonces que papá lo propuso, teníamos el plan de ir a una granja de peces, eso era bastante interesante, las había estudiado el semestre anterior, fue bastante gracioso para mi llegar ahí puesto que en realidad jamás pensé que haría uso de los conocimientos de esa clase, que se podría decir que se consideraba como una terrible pérdida de tiempo, por varios factores claro está, no solamente porque no es una clase muy aplicada en mi ciudad o en general en la vida.

Nos dispusimos pues a la granja. Unos minutos de carretera y un camino escondido, hectáreas y hectáreas de Cañaverales, de pastos gigantes con pincelitos en las puntas, decorando los campos con su color rosita. Los pocos árboles que quedaban de lo que alguna vez fue la selva en la huasteca, se elevaban; no mucho, tratando de tocar el cielo y de sobrevivir al ser humano, como todo en este planeta.

Al entrar al camino, unos minutos después, nos topamos con una puerta azul, compuesta de metal y madera, con arreglos rudimentarios para que no se estampara nunca y para que las vaquillas que ahí vivían no fueran a escapar a la carretera o a los cañaverales en su defecto.

Al llegar hicimos un poco de coraje porque habían unas, digámosles criaturas, incultas, estúpidas, sin cerebro, humanos, como último insulto, de esos que aman matar a sangre fría y que no saben en lo absoluto lo que es la compasión y pues seguramente no tienen educación y escuchan música banda. Me disgusta ese tipo de personas, quisiera hacerles precisamente lo mismo que ellos hacen, meterlos en un bosque y cazarlos, apuntarles con mi sniper o con mi DMR o cualquier arma, incluso un revólver y hacerles saber que su vida está en mis manos, justo como ellos hacen con los animales a los que atormentan.

Es muy raro, porque estoy a favor de la cacería siempre que sea para consumo propio, que sea porque es necesario, para alimentarte o para defensa personal incluso, el asesinato en sí, no lo tolero en lo más mínimo. Esa saña de llegar y decir, lo maté porque quise, por diversión, por deporte, porque se vería bonito en mi pared, me purga el alma, eso sólo habla de bestias inmundas, retrógradas, medievales que no tienen una pizca de cerebro, justo como los toreros y los que van a las corridas de toros, es muy simple, el que mata, ya sea a un animal o a una persona, incluso un árbol, con la intención de simplemente matarlo, es un ASESINO, no hay de otra, son asesinos y deberían ser erradicados de la sociedad.

En fin, El lugar era un rancho bastante grande, con varios estanques, en medio de la nada y rodeado de selva, cañaverales, animales diversos y millones de árboles, era como un pequeño paraíso.
                              
Al descender del auto, nos topamos con dos mininos, unos pequeñitos peludos que eran demasiado amables, no tenían mucho la actitud normal de un gato, eran dos gatitas. Una gris con franjitas y una blanquita de ojos azules.
Mamá se topó con unos gallos kikiriki, de pelea, que decidieron que su bota era su peor enemiga y le echaban pleito feroz, como si su vida dependiera de ello, fue bastante gracioso. Recorrimos el lugar y observamos los estanques, que ya casi estaban vacíos, recordé más cosas de las que esperaba recordar sobre la producción de peces y el mantenimiento de los estanques. Llegaron unos compradores y sacaron bastantes peces del río y de los estanques, papá decidió contratarse y ayudarles a los señores a cargarse de peces. Mientras todos estaban en sus labores y las mujeres estábamos perdiendo el tiempo en observar el panorama, encontramos una gatita más, una chica peludita. La gatita decidió que era material para ser su amiga y me siguió bastante rato para todos lados, hasta que se cansó y se echó a acicalarse.

El dueño del rancho, nos recibió bastante bien y platicó bastante rato con nosotros, muy amable y compartiendo con nosotros su desdén por la cacería y la mata innecesaria de animales. Estábamos muy tranquilos cuando de repente un águila se posó en un árbol no muy lejano de donde nos encontrábamos, observó por varias horas desde su puesto de vigilancia, no le quitaba de encima los ojos a los estanques. Resulta que todos los días llegaba y robaba un pez, pareciera como si fuera una cuota diaria que el señor debía pagar por vivir ahí.

Después de un rato y de ver al águila hacer vanos intentos en tomar un pez, regresamos al auto y volvimos al pueblo, el señor nos ofreció volver cuando queramos y nos ofreció su casa, me parecía bastante honesto, no era la típica cortesía que tiene todo el mundo sólo porque sí .

Regresamos al pueblo, hacía algo de hambre, así que nos detuvimos en un pequeño restaurantito a comer, son las enchiladas más deliciosas que he comido en mucho tiempo, bastante rico, lo disfruté demasiado y eso que no tenía tanta hambre como hubiera esperado. Quizá sea que Emanuel de verdad desea comer algo verdaderamente picante, después de todos los fiascos de pseudochile que ha probado allá en el país lejano en el que se encontraba.

Emanuel… mi semblante cambió súbitamente, siempre está en mi mente, pero esta vez fue demasiado fuerte, Emanuel… Nadie había notado el cambio en mi expresión. Algo dentro de mí se quebró, dolía, hacía algunos días no sabía nada de él ni él de mí, me preocupara que no fuera a estar bien, que se la estuviera pasando mal, que se sintiera como yo me siento cada noche con las mismas ganas de llorar…
-A unas tres cuadras hay un ciber – café, ahí consumes algo y puedes hacer uso del internet…
-Muchas gracias.

        Mis ojos brillaron, era justo lo que necesitaba, un poco de internet, para poder hablar con mi amado. Quería saltar de la alegría pero debía guardar la compostura, no quería arruinar mi felicidad con algún desplante de mi padre y sus negativas.
-Podríamos ir, consumir algo y aprovechar un ratito, si me gustaría, sería lindo.-Dije con un poco de inseguridad pero con esperanza en mis pupilas.
-Tú sólo quieres ir al internet María José.- Dijo mi hermana menor con desdén y una cara de desprecio en el rostro.
-Y eso ¿A ti que te importa?, no te afecta ¿O sí?- Le dije  con el mismo desprecio. Molesta con la forma en la que había contestado ante mi petición, ¿Qué daño le hacía si quería o necesitaba el internet? ¿Cuál era su problema?

        Finalmente, terminamos de comer y después de pagar la cuenta, nos retiramos a una tienda de ropa para hombres justo en frente de la calle en la que nos encontrábamos. Particularmente me estaba aburriendo, pero me alegraba que mi padre se comprara cosas para él, normalmente gasta su dinero en sus autos y no se compra cosas verdaderamente a él…
-Aprovecha que estamos aquí y adelántate a la cafetería esa ahorita te alcanzamos nosotros, para que tengas más tiempo y puedas platicar más agusto.

        Mis ojos se iluminaron, recibí el dinero gustosa, mi otra hermana me acompañó, caminamos hasta el lugar. Era un establecimiento pequeño, con olor a palomitas y algo encerrado…
-Palomitas.- Era la clave del wi – fi. De repente, mi celular hizo ka-boom! Se llenó de notificaciones por todos lados, pero lo que más me importaba eran las de él, hacer aunque fuera un pequeño contacto y así sucedió, pude, aunque fuera por unos minutos, saber que estaba completamente bien y que como yo, el me extrañaba y le hacía falta.
-Nunca en la vida quiero separarme de ti pequeña niña…

Hasta que tuve que marcharme y decirle un vago pero amoroso “adiós mi amor, ya debo irme” y se acabó mi momento de internet.

Regresé al aislamiento de mi hotel…

To be continued…


Cortana!

viernes, 25 de diciembre de 2015

En viajes separados... Parte 3 Aprendiendo a conducir

La noche fue bastante incómoda, dormí hasta las 11 de la mañana, pensé que el despertar más tarde me garantizaría un poco de más descanso, pero estaba en un error. Me dolía el cuello y los hombros, como cuando haces mucho ejercicio o estás muy estresado. La cama en la que ahora estoy durmiendo, no es la más cómoda que hay, es muy dura e inexplicablemente toma la forma de mi cuerpo y como que lo aprisiona, así que me quedo en una misma posición toda la noche, no es nada bonito.

Cuando por fin logré despertar, me hallé de nuevo con esa sonrisa tonta, quería descubrir que sorpresas nos deparaban para el día de hoy, aunque en realidad no hubo mucho.

Nos dispusimos a caminar, estrené las sandalias que papá me había comprado ayer, las usé junto con el vestido morado, se veían muy lindas, hubiera deseado que Emanuel estuviera ahí para apreciarlas.

Caminamos y subimos de nuevo las escaleras, fue cuando descubrí que mis piernas estaban también un poco adoloridas, pero esas si son por ejercicio, no todos los días se suben y bajan escaleras con dirección al cielo y se vive para contarlo.

El desayuno fue algo sencillo y tranquilo, sin mayor aspaviento. Pedí una orden de quesadillas con frijoles negros y de tomar un “chocomilk” y un jugo de naranja. Me encanta desayunar con jugo de naranja, de las cosas que más disfruto en la vida son los jugos naturales, sobre todo de naranja y de mango.

Después de quedarnos un rato sentados en el restaurante, escuchando el agua caer y las conversaciones familiares, bajamos de nuevo para el hotel, por las mismas escaleras que ahora nos llevaban del cielo a la tierra, me sentía como Diosa griega con mis sandalias y bajando por las escaleras al mundo de los mortales.

Resulta que nos cambiaron de habitación, eso a mí, para nada me gustó el otro cuarto, no es tan bonito como el primero, aunque viendo sus lados positivos, el piso de madera no es tan móvil y crujiente, la vista es mejor y a la regadera le sale más agua. Aún así me hubiera encantado conservar el cuarto anterior.

Estuve un rato cavilando sobre qué debía hacer y decidí que era momento de retomar mi lectura con Asimov. Esos cuentos me estaban atrapando en su mundo de ficción y ciencia aeroespacial. Culpo a Emanuel de que algún día construya una nave y explore nuevos mundos.

Me recosté en la hamaca y dormité unos minutos, la nueva vista era bastante bonita, como dije era una de las cosas rescatables del lugar nuevo. Había árboles inmensos y gruesos, el río y en frente del río un pequeño paraíso selvático, que me hacía desear olvidarme del frío y nadar hasta allí. En esos pensamientos me encontraba cuando llegó mi hermana…
-Tienen que verla, es hermosa.- Como es costumbre en ella, se tocó la cara con ambas manos y puso esa cara de desesperación porque había encontrado algo maravilloso.- Ven papá tienes que tomarle fotos a la tortuga.- Mi papá es fotógrafo y mi hermana estudia diseño industrial, este semestre ella llevó fotografía y ahora es como una especie de clan de fotógrafos, a todos lados llevan sus cámaras.

        Me llené de curiosidad, sea lo que fuera, siempre que se ponía así era porque en efecto había hecho un gran descubrimiento y valía la pena apreciarlo. Entonces los seguí, iba a tan sólo unos pasos detrás de ellos, cuando todo giró a mí alrededor y un dolor punzante recorría mi tobillo, me había doblado el pie al caer en un pequeño desnivel que había en el piso. Me había mantenido en pie, pero me dolía tanto que decidí mejor dejarme caer en el piso y esperar a que se me calmara el dolor y a que no me hubiera esguinzado o algo peor. En efecto, sólo fue cosa del momento y después de que se me calmara pude caminar hasta donde estaba la dichosa tortuga.

        Por alguna extraña razón llegué a imaginar que la tortuga se encontraba accesible y podría acercarme a ella e incluso acariciarla, pero como era de esperarse, no era así. La tortuga estaba en medio del río tomando el Sol en una especie de islita que estaba ahí formada, se veía muy apaciguada y en paz, me dio risa. Tenía la sensación de que la tortuga sabía que era observada por ese grupo de humanos y nos devolvía la mirada analizándonos.

        Después de analizar a la tortuga, regresamos a la habitación, me quedé en la terraza sentada en una silla con vista hacia el río, imaginando que un jaguar pasaba con sus patotas por el claro y se humedecía la nariz con su enorme lengua de gatote, pero no fue así y quedó más en mi imaginación que en la expectativa de la realidad.

        Después de estar un rato mirando a la nada, callados y empezando quizá a aburrirnos, papá decide proponer ir al pueblo a buscar señales de vida. El pueblo, a diferencia del lugar en el que nos encontrábamos, era muy feo, algo sucio y lleno de tierra, nada pintoresco y por lo que hemos notado, a la gente no le gusta trabajar, siempre está cerrado todo o lo están cerrando a las 4 de la tarde.

        En fin, mientras íbamos en el pequeño tramo de carretera, papá propuso prestarme la camioneta para que manejara un poco, me senté en el asiento del piloto, acomodé el mismo a mi pequeño tamaño, ajusté mis cinturones y arranqué. El camino no es algo bonito tampoco, está asfaltado, pero es un camino sumamente irregular y es mucho más notorio cuando vas manejando y aún más cuando no sabes lo que estás haciendo y tu padre está corrigiéndote todo el tiempo para evitar accidentes. Sin embargo no fue una experiencia desagradable, hasta cierto punto, sentía que sabía lo que hacía y se sentía bastante natural, la verdad me muero de ganas de tener mi propio auto y poder moverme como quiera a donde quiera.

        No encontramos nada interesante en el pueblo y después de un rato de pasear sin rumbo en el auto, decidimos retornar al hotel. Llegamos y caminamos de nuevo hacia las escaleras que van al cielo, a pesar de que las hemos subido y bajado tanto y que sí llego a sentir un poco en mis piernas el ejercicio, contrario a lo que yo pensaría, aún no se me hacen complicadas de subir y casi no me quitan el aliento, lo cual es un alivio. Que por cierto, ahora que menciono esto, me llego a dar cuenta de que no traigo mi inhalador conmigo.

        Comí un rico fetuccini, como el del primer día sólo que esta vez acompañado de pollo, creo que el primero estaba más bueno, tomé una deliciosa coca y me puse toda gordita, lo cual fue extraño porque no había comido tanto.

        Como he dicho otros días, el hotel y el restaurante no están lejos uno del otro y al restaurante se puede llegar por dos entradas, una son las escaleras y la otra es la carretera. Mientras comíamos, el día iba perdiendo luminosidad y una vez que habíamos terminado, la noche nos había envuelto completamente. Las escaleras eran una idea mortal con la obscuridad que nos rodeaba, así que decidimos mejor tomar la carretera, que aunque era un poco más segura, también era bastante arriesgado. Por un lado se encontraba un precipicio y por el otro la carretera por la que regularmente pasaban camiones, llegamos a nuestro destino sanos y salvos.

        Por alguna razón me sentía muerta, así que apenas toqué mi cama caí en un sueño bastante profundo…

To be continued…


Cortana!